DESCRIPCIÓN DEL ENTORNO - versión original

Certidumbre cumplió su engaño otra vez. Cíclicamente alguien esboza levantar los párpados o abre los ojos un instante. Cíclicamente acecha la zona iluminada a quien descubre (siempre es la primera vez).
(Miedo a querer más. Sobrevivir sin la muerte)
La palabra es un lugar inhóspito y se torna hostil. Es una máscara hueca, y la febril imaginación de los esclavos es ser dueños de ella. La palabra no libera. Obviamente no propongo nada al respecto y esto es también mentira. Ficción, como el miedo al vacío, al salto, a mirar y expectar sin conocer.
Las culturas se desintegran y generan infinitos big-bangs a cada momento. Espacios esperando su semanticidad.
Encontrar otra vez la salina. Saber que está y estuvo allí por mí. No importa para qué ni por qué, sólo dice esperar un surco. Mi paso.
Abismal señora. El gran masaje. Ninguno de tus nombres viene hoy, y yo circundo la otra cara de tu moneda, pero sin olvidar.
Gente que huye de aquí, de siempre, de todo posible lugar. No pueden articular alguna sílaba en su escapada. Tomen las imposibles drogas justo a tiempo antes de la luz. Sería muy bueno. Lenguaje de plástico y telgopor hecho a mano y deshecho en un abrir de lobreguez. Cardumen material, cancel de mi límite donde es imposible ser ausente siempre. Un colador que ha dejado de disecar y ser el filtro leve. Y se van.
Encender la última fogata. El desierto vela expectante. La última caída al último extremo, ausente lugar. Execrable última vez, capa sobre los presentes.
Entender fuerzas hacia adentro. Abrir canceles ideales hasta no distinguir formas en intramarea. Ella vuelve y nos acondiciona a ver todo. No me había internado por voluntad sino por venganza. Un día especial. Creo haber visto los árboles y el césped dentro mío. Los transformaba en mi alimento. Sé que con otro fondo y otra música sería diferente, cercano al deseo y a la extinción de toda humanidad.
¿Qué dirías si al llegar en vez de tu cuerpo saludándote y preguntándote cómo te fue por esos tiempos y esos espacios lejanos a la idea de él mismo, hallás una fría y melancólica sombra de neblinas que recordás vagamente y no pregunta ni habla, sólo monologa y recrea lágrimas de las que no es capaz de acordarse, y por eso se atormenta y te ornamenta completamente sin intención?
Mar y vuelta al suelo, a la piedra, a esa otra existencia de la que callamos el origen. El problema de la poesía. Haber desistido. Estar de ese lado del espejo perdiendo la ropa que te hacía sangrar por sangrar. No se explica el por qué.
La pantalla mostraría recuerdos del futuro.
(El día en que las libélulas y yo nos animemos a cruzar la puerta del convencionalismo y entremos de manera brutal al tercer cielo y vana sed de ahoras será un día muy triste debido a que para que esto sea posible hubo que tirar por la borda casi todo lo materia que habías obtenido por ley de la naturaleza y no se puede enumerar ahora. El tiempo verbal muta debido a los alcoholes que ella, (iban a decirle, iban a hacerte parte de la otredad) que ella sin otro particular e intravenosamente emana haciendo el imán del que no se regresa ileso.
El día en que las larvas y yo aparezcamos por la cerradura será un día muy breve debido a la pronta mirada de personajes que eclipsan y van a ocupar toda la pantalla e impedir que saquemos los ojos de ella por un tiempo más que largo.)

Comentarios

Entradas populares